Encontramos tesoros en los vinos de Trebujena

En el segundo día de las XXIII Jornadas del Vino Fino visitamos la Cooperativa Vitivinícola Albarizas de Trebujena. Constatamos las posibilidades de sus vinos. Tras cuarenta años de andadura fundamentados en los mostos, y para celebrarlo, sacan una gama de vinos embotellados. Se trata de dos vinos blancos, Terralba y Bijuré y tres generosos (fino, amontillado y generoso). 

Terralba, refleja en su nombre las magníficas tierras albarizas en las que se encuentran los viñedos. Proviene de los afamados mostos de la Palomino Fino de Trebujena.

Bijuré  significa dorado en el idioma Caló del pueblo gitano; el dorado de los vinos y de las puestas de sol sobre las marismas. Fermentado en botas, provenientes de las soleras de crianza de finos, amontillados y olorosos. Elaborado a partir del vidueño, una mezcla de variedades muy antiguas, casi extinguidas, provenientes de cepas centenarias como la Perruno de Arcos, Mantúa de Pilas, Barceloné, Castellano, Cañocazo, Desconocida, Uva Beba. Se produjeron 2500 botellas en 2017, que se agotaron en seis meses.

Castillo de Guzmán, es la marca de los vinos generosos, y recuerda a D. Juan Pérez de Guzmán descendiente de Guzmán 'El Bueno', que concedió la identidad como pueblo a Trebujena en 1494, y además concedió a cada poblador que viniese dos aranzadas de terreno (en torno a 1 Ha.), una de las cuales debía ser dedicada al cultivo de la viña. Sus soleras provienen de la propia cooperativa. Se trata de vinos que han estado envejeciendo durante 18 años sin sacas, lo que les da una personalidad diferenciada; la de los vinos de Trebujena

En nuestra particular singladura como buscadores de tesoros, a los que estaban dedicadas las Jornadas, encontramos un inesperado y valioso hallazgo en Trebujena. Un tesoro que nos parece asociado a un formidable futuro.